Las espumas elastoméricas las empleamos en Aistercom en ciertos proyectos de aislamiento industrial en frío, es decir, un aislamiento de instalaciones con este tipo de espumas elastoméricas de bajas y altas temperaturas según especificaciones del producto y recubierto de chapa exterior para su protección medioambiental externa si fuera requerido.
Como veis, las espumas elastoméricas son materiales compuestos principalmente de cauchos sintéticos como el NBR y el EPDM. ¿Por qué las empleamos en este tipo de trabajos? Porque destacan por su capacidad de aislamiento (térmico y acústico) y por su resistencia a la humedad y productos químicos.
Vemos más en profundidad a qué nos referimos.
Comprendiendo las espumas elastoméricas
En la industria, las espumas elastoméricas son excelentes para proyectos de climatización, refrigeración y aislamiento de tuberías. Y lo son por su flexibilidad y durabilidad, que las convierten en una opción muy efectiva en el objetivo de mantener la eficiencia energética en instalaciones industriales.
Las espumas elastoméricas son materiales obtenidos a partir de la expansión de polímeros, que se convierten en espumas al incorporar agentes espumantes. Esta transformación crea una estructura celular que puede ser cerrada o semiclosed. La composición específica de estas espumas depende del tipo de caucho utilizado, lo que influye directamente en sus características finales.
Tipos de espumas elastoméricas
Existen diversos tipos de espumas elastoméricas, cada uno con propiedades y aplicaciones específicas.
☑️ NBR (caucho de nitrilo butadieno)
El caucho de nitrilo butadieno (NBR) es un tipo de elastómero que destaca por su alto nivel de resistencia a aceites, combustibles y productos químicos. Teniendo en cuenta esto, es una opción muy valorable para aplicaciones en entornos industriales donde se requiere una gran protección contra fluidos.
Si lo medimos por su capacidad de adaptación a diferentes temperaturas, es toda una garantía, perfecto para condiciones variables.
☑️ EPDM (caucho de etileno propileno dieno)
Por su parte, el EPDM es una espuma elastomérica conocida por su excelente resistencia a la intemperie, rayos UV y ozono. Especialmente adecuado para aplicaciones al aire libre y en entornos donde se requiere durabilidad frente a agresiones ambientales.
También, como el NBR, sirve en muy diferentes contextos en proyectos de aislamiento, dada su elasticidad y longevidad.
Propiedades y características distintivas
Las características propias de las espumas elastoméricas determinan su preciso desempeño en función de la aplicación que se le vaya a dar. En materia de aislamiento térmico, poseen baja conductividad térmica, lo que reduce las pérdidas de calor y mejora la eficiencia energética. Si hablamos de resistencia a la humedad, destacamos su estructura de celda cerrada, que evita la penetración de agua, y, por tanto, los problemas de corrosión y moho.
Son también resistentes a condiciones extremas y productos químicos (durabilidad y vida útil prolongada), y su ligereza y maleabilidad (flexibilidad) facilitan la manipulación y la instalación en diversas formas y tamaños.
Otra característica que mencionaríamos es su capacidad de absorción de sonido (aislamiento acústico), que, hablando de infraestructuras industriales, es de agradecer a la hora de proteger el entorno exterior (en muchos proyectos se recubre además de chapa exterior para su protección medioambiental externa).
Aplicaciones de las espumas elastoméricas en la industria
Acabamos de mencionar su alta capacidad de aislamiento térmico y acústico que en sectores industriales es muy valorado, pero también lo vemos como opción eficiente en otras tipologías de proyectos, como, por ejemplo, de climatización. Y es que muchos sistemas de climatización en instalaciones industriales dependen en gran medida del uso de espumas elastoméricas.
Conductos de aire acondicionado
Un claro ejemplo de utilización de espumas elastoméricas. Se utilizan con frecuencia en los conductos de aire acondicionado gracias a su capacidad de aislamiento, que ayudan a mantener las temperaturas adecuadas en los espacios regulados.
Refrigeración industrial
En el ámbito de la refrigeración industrial, las espumas elastoméricas son determinantes para el aislamiento de los equipos y sistemas de refrigeración. ¿Por qué? Porque previenen la pérdida de energía y contribuyen a un funcionamiento más eficiente de las instalaciones en general. Esto ahorra, a largo plazo, los costes operativos.
Protección y durabilidad en instalaciones industriales
Esta tipología de espumas ya sabemos que proporcionan un alto aislamiento, pero también logran proteger los componentes y estructuras de posibles daños derivados de condiciones ambientales adversas.
Son ampliamente aplicadas en el aislamiento de tuberías, por ejemplo, tanto de agua caliente como de agua fría. Y es así por su capacidad para resistir la humedad y los productos químicos.
Las espumas elastoméricas aseguran que el calor se mantenga en su lugar y evitan pérdidas energéticas, lo que mejora considerablemente la eficiencia general del sistema de agua. Como especialistas en entornos industriales que somos Aistercom, esto lo consideramos especialmente útil en estos entornos donde la temperatura del agua es crítica para el proceso productivo.
Sistemas de refrigeración
Un desafío común en sistemas de refrigeración, de siempre, es la condensación. Las espumas elastoméricas son determinantes en la prevención de la acumulación de agua, ya que minimizan los problemas de corrosión y fungicidas. Esto se traduce en una mayor eficacia del sistema y prolonga la vida útil de los equipos.
Ventajas de las espumas elastoméricas
Vamos a destacar las principales por las que las espumas elastoméricas son una opción fiable en el ámbito de los materiales aislantes, tanto en aplicaciones industriales como de construcción.
☑️ Flexibilidad y facilidad de instalación
Su notable flexibilidad hace que sean fácilmente moldeadas y adaptadas a diferentes formas y configuraciones, lo que resulta ideal para instalaciones complejas. La capacidad de ajuste de las espumas elastoméricas simplifica el proceso de instalación, haciendo más sencillo su corte y la manipulación en el lugar de trabajo.
En este sentido, el ahorro de tiempo en la instalación es significativo, ya que su ligereza y diseño se traduce en facilidad de manejo y menos inversión en mano de obra. Esta facilidad también implica una menor necesidad de herramientas específicas y, en consecuencia, una disminución de los gastos en el proyecto global.
☑️ Resistencia a la humedad y agentes químicos
Las espumas elastoméricas son altamente resistentes a la penetración de humedad, lo que se traduce en una protección efectiva contra el moho y la corrosión. Gracias a su estructura de celda cerrada, impiden la acumulación de agua, lo que asegura la integridad del aislamiento a largo plazo en instalaciones que pueden verse expuestas a condiciones húmedas o mojadas.
Asimismo, la resistencia química de estos materiales es más que notable. Son capaces de soportar el contacto con diversos líquidos y sustancias sin sufrir daños significativos. En entornos industriales, es toda una ventaja sin duda.
En definitiva, el rendimiento de las espumas elastoméricas no se verá comprometido ni por la humedad ni por los agentes químicos, incluso en las condiciones más adversas.
☑️ Longevidad y durabilidad en condiciones extremas
El tiempo de vida útil de las espumas elastoméricas es prolongado gracias a sus propiedades inherentes. Su resistencia a la degradación por exposición a los rayos UV, así como su capacidad para mantener sus características estructurales en condiciones de temperatura extrema, son aspectos que destacan su robustez en aplicaciones exteriores e interiores.
Va a exigir un menor mantenimiento y reemplazo, perfecto en términos de rentabilidad del proyecto, y también si hablamos de sostenibilidad (se reduce la necesidad de materiales de reposición y el desperdicio asociado a los mismos).
Preguntas frecuentes sobre espumas elastoméricas
Dado que son menos conocidas las espumas elastoméricas que otras soluciones de materiales como el poliuretano, recogemos a continuación algunas preguntas comunes que nos hemos ido encontrando a lo largo de los años en Aistercom.
¿Qué hace a las espumas elastoméricas diferentes de otros aislantes?
En primer lugar, su estructura de celda cerrada permite que resistan la penetración de humedad, lo que las convierte en una opción ideal para entornos donde la acumulación de agua es un riesgo. A su vez, poseen una baja conductividad térmica, lo que asegura un eficaz aislamiento térmico, mientras que su flexibilidad facilita su instalación en espacios complejos.
Por otra parte, su resistencia a productos químicos y condiciones meteorológicas extremas destaca su durabilidad, lo que las hace aptas para aplicaciones industriales. En comparación con otros aislantes como la fibra de vidrio, las espumas elastoméricas suelen ofrecer igual rendimiento con menos peso, lo que facilita la manipulación y la colocación.
¿Cuáles son los beneficios del uso de espumas elastoméricas para el aislamiento térmico en zonas secas?
Las espumas elastoméricas contribuyen a mantener temperaturas estables, lo que reduce costes en calefacción y refrigeración. Su resistencia a la humedad ayuda a evitar problemas como la formación de moho y la corrosión, y su ligereza y flexibilidad permiten una colocación rápida, reduciendo tiempos y costes de obra.
También destacar su longevidad, que asegura un rendimiento óptimo a lo largo del tiempo y minimiza la necesidad de mantenimientos frecuentes.
¿Cómo contribuyen las espumas elastoméricas a la eficiencia energética?
La eficiencia energética se ve reforzada por el uso de espumas elastoméricas gracias a varios factores. Su baja conductividad térmica impide la pérdida de calor, permitiendo que los sistemas de climatización funcionen de manera más efectiva y con menores consumos energéticos. Este tipo de espuma, al ser un buen aislante, permite que los ambientes interiores mantengan una temperatura adecuada, lo que se traduce en menores facturas energéticas.
Además, su capacidad para resistir la humedad elimina el riesgo de condensaciones que podrían afectar la eficiencia de los equipos de calefacción y refrigeración, evitando pérdidas de energía. Esto resulta en un impacto positivo no solo en los costes operativos, sino también en la huella de carbono asociada a un uso intensivo de energía.
¿Qué consideraciones tener en cuenta al elegir espumas elastoméricas para interiores y exteriores?
Nos tocará evaluar el entorno en el que se utilizarán, especialmente en cuanto a temperatura y exposición a humedad. Hay que asegurarse que el material elegido cumpla con las regulaciones de construcción y eficiencia energética de la zona, y definir si se trata de un uso en interiores o exteriores, dado que puede influir en la elección del producto (cada uno tiene propiedades específicas para soportar diferentes condiciones ambientales).
Por último, valorar bien los grados de dureza que se necesitan dependiendo de la aplicación, ya que la flexibilidad también juega un papel clave en la instalación.
Conclusiones
En Aistercom aprovechamos todas estas características y ventajas de las espumas elastoméricas en proyectos de aislamiento de instalaciones, recubriéndolas de chapa exterior para su protección medioambiental externa si así lo exigiese la casuística de los trabajos.
Solución de garantía en proyectos de climatización, refrigeración y aislamiento de tuberías en el ámbito industrial. Gracias a esa característica estructura celular que puede ser cerrada o semiclosed, evita la irrupción del agua y los problemas asociados a ella (corrosión, moho…).
Aistercom somos empresa especialista en ejecución de aislamientos industriales en frío empleando espumas elastoméricas. Contactad con el equipo para más información y asesoramiento.
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